Experiencia Misionera:

Hola: quiero compartirles mi experiencia pastoral, como Carmelita Misionera: soy integrante del Grupo “Noche de la Caridad”, en la Parroquia de San Cayetano de Belgrano, realizamos el “último eslabón de la cadena” de un servicio que cada semana convoca a diferentes voluntarios a lo largo de todo el día; el momento de encuentro en la noche, es caluroso y espontáneo: charlamos y compartimos vida, mientras terminamos de preparar las viandas antes de salir cada grupo a su lugar en cinco lugares del Barrio, oramos y ofrecemos nuestra vida y servicio al "Dios de los pobres"
Yo voy a la plaza Noruega, en donde nos esperan familias enteras: niños, jóvenes embarazadas, ancianos, que por la dura realidad social, tienen que venir de lejos para buscar acogida, escucha, amistad, y también, la porción de comida de esa noche, después de un largo día de trabajo recolectando cartones, o vendiendo artesanías obra de sus manos para poder vivir.



Es duro pensar que la noche no es igual para todos: particularmente al mirar a los niños totalmente desprotegidos, que como diversión, juegan con los cajones de fruta y se imaginan que es una gran mesa en donde comen juntos; y en medio de esa espontaneidad, risas, miradas profundas, está latente también, el peligro de la droga, de la violencia, de la prostitución…


Esta es una experiencia que deja huellas en mi, y oportunidad  de poder brindarles una mirada, una sonrisa, un fuerte abrazo, tal vez solo el estar a su lado y escuchar lo que de corazón te comparten. La presencia de Dios es palpable aún más, cuando cada hermano/ hermana está vulnerado en sus derechos...
Hacen  eco profundo en mi vida la experiencia y el llamado de nuestro Padre Fundador: " Hijas mía,  es tiempo de trabajar y sacrificarse por los prójimos".
Gracias hermanas, por esta experiencia que me permiten vivir, por ser ustedes también instrumentos de la obra de Dios, que va labrando en mi interior.


Gracias por la oportunidad de anunciar su palabra en los más necesitados, sencillos y sobre todo a vivirlo de corazón.
Y Vos: ¿ te animás con nosotras?
                                                              Hna Leila Colombo, cm