F. Palau
En este espacio deseamos compartir con uds. una carta de nuestras hermanas en Japón. La tomamos de nuestro informativo de Europa. He aquí el texto:
Gracias hermanas por vuestra comunicación y apoyo con la oración.Nosotras y las hermanas de Kyoto estamos seguras. Pero la situación aquí es muy, muy dolorosa. Nosotras también admiramos a la gente de Japón, por sus buenas cualidades. Podemos aprender muchas cosas de los japoneses.
Muchos extranjeros han abandonado el país y esto a los japoneses les ha dolido mucho. Muchas personas de la zona del terremoto, incluidas las de Tokio han llegado a esta zona a quedarse y están emocionalmente afectadas, ya que tienen que salir de su sitio y venir aquí. Muchos de ellos han perdido a sus familiares por lo que necesitan nuestro asesoramiento y apoyo. También existe el peligro de la radiación, tanto en comida, vegetales, leche, etc. y a menudo hay pequeños temblores, incluido Tokio, por lo que la gente está en situación de pánico.
Nuestro corazón se rompe cuando vemos las imágenes en televisión. Esperamos que la situación pronto se arregle. Sólo Dios sabe lo que es su plan para Japón. Por favor,
continúen orando por el pueblo de Japón.
Unidas en oración
Beatrice D’Cunha, cm
(Fuente: "Por caminos nuevos", Informativo Nº 23, Marzo 2011)
La virtud está escondida en la Cruz
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