Señor Dios, Padre de toda la humanidad
te damos gracias por habernos llamado a la fe
y a ser parte de la santa Iglesia.
Reaviva en nuestras comunidades el espíritu misionero.
Ayúdanos a comprender que el primer deber es creer,
vivir y anunciar el Evangelio de tu Hijo Jesús.
Haz resonar en nuestros corazones
la voz apremiante de Jesús: "sígueme".
Danos el valor de ir predicando aquí y
más allá de las fronteras, la salvación a quienes no la conocen.
Que tu mies tenga obreros y tus ovejas buenos Pastores.
Te lo pedimos por intercesión de María, Reina de las misiones,
la que nos entregó a su Hijo, Consuelo de la Humanidad. Amén.
Santa Teresita del Niño Jesús, ruega por nosotros.
San Francisco Javier, ruega por nosotros.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
DEJANOS TU COMENTARIO