LA PALABRA ES
GENERADORA DE VIDA
En la Biblia, el concepto “Palabra” difiere un poco del
nuestro. Nosotros decimos palabras y palabras, y puede ocurrir que no suceda
nada. En la Biblia no es así: el término “dabar” significa al mismo tiempo
“palabra” y “acción”. Por eso cuando Dios
“dice” también “hace”, como nos lo muestra el Génesis: el decir de Dios
es hacer (ver Gn 1).
Dios se relaciona con el hombre por medio de la “Palabra” . Su Palabra no sólo nos permite saber
cosas sino que es todo un acontecimiento que realiza con nosotros…
En la amistad con Dios, la Palabra se encarga de generar
vida en nosotros porque, como bien nos dice Jesús, ella es “Espíritu y Vida” (Jn 6,
63). Ya desde el Antiguo Testamento se había dicho: “Porque no es algo que ustedes
puedan tomar a la ligera; esta ley es vida para ustedes, y por ella vivirán”
(Dt 32, 47).
¿De qué manera la Palabra es generadora de Vida? Nos lo
explica el profeta Isaías con una comparación:
“Así como la lluvia y la nieve
bajan del cielo,
y no vuelven allá, sino que
empapan la tierra,
la fecundan y la hacen germinar,
y producen la semilla para
sembrar
y el pan para comer,
así también la Palabra que sale
de mis labios
no vuelve a mi sin producir efecto,
sino que hace lo que yo quiero
y cumple la misión que le doy”
(Is 55, 10-11)
Jesús comparó la Palabra con una
semilla(Lc 8, 11) y en varias parábolas describe el desarrollo que experimenta
y los resultados que se pueden esperar.
Por su parte, la carta de Santiago
dice que el Padre Dios “Él, porque así lo quiso, nos dio vida
mediante el mensaje de la verdad, para que seamos lo primeros frutos de su
creación” (Sant 1, 18). También dice Pedro: “Pues ustedes han vuelto a nacer,
y esta vez no de padres humanos y mortales, sino de la Palabra de Dios, que es
viva y permanente” (1 Pe 1, 23).
La expresión “Palabra de Vida”,
entonces quiere decir “un medio que nos da la capacidad de vivir
en Dios”.
CONTINUARÁ…
(Fuente: “Manual de Lectio Divina para jóvenes
misioneros”)
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