En la Jornada Mundial de la Juventud de París, un joven le
preguntó a Juan Pablo II: “¿Qué está bien y qué está mal en el noviazgo?” A lo
que el Papa respondió: “Está bien lo que puedes hacer enfrente de tu mamá”. Si
Cristo te pide ser casto en el noviazgo, dile que sí. Nosotros no somos nadie
para darle lecciones de felicidad al creador de la felicidad.
El noviazgo es para escoger a tu acompañante para la vida y a la madre o padre de tus hijos. “El que sólo ama hoy y no le interesa amar mañana, no sabe lo que es el amor, pero sí el capricho. El verdadero amor quiere durar para siempre”. Aunque toda convivencia a la larga traiga problemas.
Ninguna persona es un objeto de placer para satisfacer tus pasiones desordenadas. Tu pareja no es un objeto para que tú puedas disfrutar de ella. Si tu usas a tu pareja y ella te usa a ti para proporcionarse mutuamente placer, sólo están viviendo una “comunión de egoísmos”. Eso es rebajarse a simples objetos de
placer recíproco. El verdadero amor busca en el otro no algo para
disfrutar, sino alguien a quien hacer feliz. No eres novio de un cuerpo, sino
de una persona con cuerpo y alma. La felicidad de tu pareja debe ser tu propia
felicidad. Recuerda que el regalo más grande que le puedes ofrecer a tu futuro
esposo o esposa es llegar virgen a tu matrimonio. Dice Jorge Loring que “todos
prefieren una de estreno. Nadie quisiera una de primera, segundo o quinta
mano”.El noviazgo es para escoger a tu acompañante para la vida y a la madre o padre de tus hijos. “El que sólo ama hoy y no le interesa amar mañana, no sabe lo que es el amor, pero sí el capricho. El verdadero amor quiere durar para siempre”. Aunque toda convivencia a la larga traiga problemas.
Ninguna persona es un objeto de placer para satisfacer tus pasiones desordenadas. Tu pareja no es un objeto para que tú puedas disfrutar de ella. Si tu usas a tu pareja y ella te usa a ti para proporcionarse mutuamente placer, sólo están viviendo una “comunión de egoísmos”. Eso es rebajarse a simples objetos de
Sé fiel a tu pareja como quieras que ella lo sea contigo. La infidelidad es el cáncer del amor. Busca una pareja que vista con pudor. Quien viste sin pudor quiere que la aprecien por lo que su cuerpo ofrece y no tanto por lo que ella es. Que tus dones físicos nunca te aparten de tu dignidad y de la vida de gracia.
El noviazgo es la escuela donde se aprende a amar como preparación inmediata para el matrimonio. “Escuela del amor. Esto debe ser el noviazgo. La escuela en la que dos jóvenes se conocen a fondo y aprenden a amarse de veras, a desprenderse de sí mismos para darse al otro y dar vida a otros, sus futuros hijos”. El noviazgo es para conocerse, aceptarse y superarse en pareja. En el noviazgo abre los ojos y en el matrimonio ciérralos un poco.
Para perseverar en el amor durante el noviazgo hay que vivir el consejo de las tres “Des”: Dios. Diálogo. Detalles.
a. Dios: pareja que reza unida, permanece unida.
b. Diálogo: Mayor será la armonía matrimonial cuanto mayor sea la armonía espiritual. ¿Cuáles son sus convicciones respecto a la religión, al matrimonio, a la apertura a la vida, a la educación de los posibles hijos…? ¿Está madurando nuestro amor? ¿Hay armonía en nuestras relaciones o son frecuentes los roces y las discusiones? ¿Por qué? ¿Nuestras aficiones e ideales se complementan armónicamente o son causa permanente de discordias?
c. Detalles: el amor nunca puede estar ocioso. Cada recuerdo es un alimento del amor. Un recuerdo da alegría, pero un detalle aumenta el amor. El amor es un fuego que hay que mantenerlo vivo. Séneca afirmó: “Si quieres ser amado, ama”.
A continuación te dejamos una Oración para los Novios.
En mi corazón, Señor,
se ha encendido el amor
por una criatura que tú conoces y amas.
Tú mismo la pusiste delante mio
y un dia me la presentaste.
Te doy gracias por este don
que me llena de alegría profunda,
que me hace semejante a Ti, que eres amor,
y que me ayuda a comprender
el valor de la vida que me has dado.
Ayudame para que no malgaste esta riqueza
que tú pusiste en mi corazón:
Enséñame que el amor es don
y que no puede mezclarse con ningún egoísmo.
Que el amor es puro
y que no puede quedar en ninguna bajeza.
Que el amor es fecundo
y desde hoy debe producir
un nuevo modo de vivir en los dos.
Te pido, Señor,
por quien me espera y piensa en mí;
por quien camina a mi lado;
haznos dignos el uno del otro;
que seamos ayuda y modelo.
Ayúdanos en nuestra preparación al matrimonio,
a su grandeza, a su responsabilidad,
a fin de que desde ahora nuestras almas
dominen nuestros pensamientos
y los conduzcan en el amor.
Amen.
(Fuente: aleteia.org)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
DEJANOS TU COMENTARIO