Ayer te compartíamos una canción de Santiago Benavides, que
era una invitación a ponerte en “modo vida”, a conectarte desde dentro con vos,
con quienes te rodean, con el Dios que te vive dentro y que pasó por la
creación dejando sus huellas…
Hoy queremos seguir rumiando esto… Y nos resonaban estas
tres palabras tan interesantes para este tiempo de verano: VACACIONES, OCIO Y
CONTEMPLACIÓN.
Claro, es que las vacaciones son un tiempo más que propicio
para permitirnos practicar estas dos actitudes, el cese de actividades, o el
cambio de las mismas o el mismo clima lo favorecen.
En una cultura como la nuestra, en la que, aunque no vivas
en una gran ciudad, te pasas el día corriendo, yendo y viniendo: el trabajo, la
casa, la familia, los amigos, el novio/a, la parroquia, las mascotas, el
transporte, el país, el dólar, la crisis,etc.,; parar y tomarse un respiro, es
algo fuerte y dificultoso.
A veces, incluso cuando estamos cansados de tanta actividad,
nos cuesta parar y disfrutar del no hacer nada. Los filósofos antiguos
afirmaban que el ocio es sumamente importante para filosofar, junto con otra
actitud, la capacidad de sorprenderse ante la realidad. Pero… ¿cómo vas a
sorprenderte de lo que pasa a tu alrededor si no te das un tiempo, sino detenés
la marcha acelerada en la que vivís?
El ocio, el verdadero ocio, no ese que está disfrazado de
pereza, sino el que supone la entrega confiada al presente. Es un vivir “presentes”,
en el AQUÍ Y AHORA, a nosotros mismos y a nuestro entorno vital. Implica, este
ocio, encarnar el consejo evangélico de no preocuparnos por el día siguiente y
a la vez tener apertura hacia el futuro. Por eso en el ocio hay esperanza y al mismo
disponibilidad, creatividad y alegría.
Es esta apertura, disposición y capacidad de maravillarnos
en la que nos introduce el sano ocio, dónde se encuentra como en germén la
posibilidad de abrirnos a la contemplación orante.
¿Y vos tenés momentos de ocio? ¿Son espacios gratuitos y
libres que te permiten entrar en contacto con lo esencial y genuino?
Esperá el post de mañana donde hablaremos de la tercer
palabra y pasaremos del ocio a la CONTEMPLACIÓN…
CM Argentina
(Algunas ideas están
tomadas de la revista “Orar” n° 107)
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