ORACION DE UN ADOLESCENTE

Señor, en esta mañana  de frío quiero encontrarme con Vos.

Me dicen que Vos estás en todo lo que me pasa y yo hasta lo repito, aunque de repente, casi nunca, o pocas veces lo he experimentado. Me dicen que Vos sos Amigo, pero es difícil sentirte, ¿Sabés lo que pasa?

Me cuesta pensar en Vos, cuando ni yo mism@ me entiendo, y me complico y me mareo con todo lo que me pasa…

Y cuando estoy viviendo tantas cosas nuevas que me atraen, que me fascinan, y al mismo tiempo me dan miedo…

Ahí esta mi vida de estudiante, ¡y las notas! ¡y las materias! ¿Qué tienen que ver las materias conmigo, con lo que me importa?

Es verdad que si no estudio no podré ir adelante, pero…¡mirá que el estudio le trae problemas a un@!...¿Sabés lo que es aguantar las materias que no te gustan? Si hasta clasifico los días en lindos o feos ¡por las materias que me tocan!

Y vivo en tensión porque toman prueba o porque hoy me van a llamar y no estudié , o no entiendo nada…

Y, todos los problemas que me trae esto en casa:

-“¡que no puede ser!

-“¡que no vas a salir más los fines de semana!

-“¡que no valoras el sacrificio que estamos haciendo por vos!...”

Y yo me siento culpable, Señor, y duele horrible que mis padres sufran, pero, al mismo tiempo, me da rabia, y como que  me siento atad@, obligad@, con una carga que me pusieron y no termino de aceptar.

A veces los mayores parecen creer que eso es lo esencial de mi vida, y que lo demás son pavadas, que me tienen que tolerar o aguantar, ¡pero, la verdad, que no es así!

Que si muchas veces estoy desganad@, triste o agresiv@, o me revienta que me quieran hacer pensar en lo que aparentemente no me importa, es porque estoy ahogad@ por tantas cosas que me pasan al mismo tiempo, y que me abruman y me angustian.

Y yo no sé qué hacer, ni por donde ir, y entonces me “escapo”, “sueño”, escucho música o hago cosas divertidas.

Y es muy duro sentir amor, vibrar de emoción y de alegría, y no saber cómo decirlo, o ser rechazad@, o lastimarse, o no entender por qué lo siento así, tan fuerte y persistente, a veces tan cambiante… y, las más de las veces, con una soledad que te penetra, que te llena, que te encierra, y no sabés como cómo salir adelante.

Y cómo manejar las cosas que siento, si está bien lo que hago o lo que hacemos, si está mal, … y como hacer.

También está el grupo las barras, los amig@s, que me aceptan, que no…que sí…que aquél…que aquélla…y mi inseguridad…y mis miedos…

Continua vos…