Ha concluido la máxima celebración multitudinaria de fe en
Jesús Eucaristía de nuestro pueblo argentino y ha dejado corazones agradecidos por el paso de Dios en estos días de júbilo y misericordia.
Desde el 16 al 19 de junio los cristianos católicos nos
reunimos en la ciudad de San Miguel de Tucumán para compartir juntos
reflexiones, oraciones, misas y festejos en torno a Jesús Eucaristía. El lema
convocante: “Jesucristo, Señor de la historia, te necesitamos” fue la
jaculatoria recurrente en los momentos de encuentro masivo. El lugar de
encuentros masivos era el Hipódromo capitalino y el de áreas en distintos
colegios de la ciudad.
La arquidiócesis de Tucumán, bajo la guía de Monseñor Zecca,
su arzobispo, se encargó de la
organización de dicho evento. Las flias tucumanas acogieron a los peregrinos
venidos de distintos puntos del país, los colegios de la ciudad fueron lugares
de reflexión, trabajo de grupo, oración y envíos misioneros.
El Santo Padre se hizo presente por medio del legado especial al XI Congreso
Eucarístico Nacional, cardenal Giovanni Battista Re, quien llegó a Tucumán el jueves 16 y cerró el Congreso presidiendo la Eucaristía del día domingo.
ÁREAS TEMÁTICAS
El CEN dividió a los congresistas por áreas temáticas:
Catequesis y pastoral bíblica; liturgia; educación; ecumenismo; salud; pastoral
misionera; solidaridad; familia; migración y turismo; pastoral social y laicos;
mundo; arte y comunicación; pastoral penitenciaria y adoradores. Las mismas
tenían centros en diferentes puntos de la ciudad, en los cuales los
congresistas escuchaban ponencias, oraban, trabajaban en grupos, sugerían respuestas a
desafíos actuales para la Iglesia y compartían los almuerzos, esto durante la
mañana. Por la tarde eran invitados a sumarse a las procesiones presididas por imágenes
de la Virgen y la Ssma Cruz con destino al campo central ubicado en el
Hipódromo de la ciudad.
RUTINA DIARIA
Cada día los congresistas empezaban la jornada con la
oración de Laudes que rezaban juntos en las pquias de destino, y desde allí se
dirigían a sus áreas temáticas. Algunos tuvieron ocasión de visitar la Casita
de Tucumán y los alrededores, la ciudad estaba vestida de celeste y blanco, y
se respiraba en el ambiente un no sé qué de historia con memoria agradecida
hacia los próceres de la Patria que lucharon, hasta dar la vida por los ideales
evangélicos.
PRESENCIA DE DIOS
Cada día se vivieron momentos de fraternidad, oración, adoración Eucarística y reconciliación. El tema central de este Año de la Misericordia se vivió el día viernes, dedicado a las confesiones incesantes, caminando por la ciudad podías encontrar sacerdotes confesando en plazas públicas, calles, centros de áreas y hasta en el mismo predio del Hipódromo, fue el día de exaltación de la Misericordia de Dios, del Amor inconmensurable de nuestro Padre del Cielo.
Agradecemos junto con todo el pueblo argentino a Jesucristo, Señor de la historia que se acercó a las puertas de nuestro corazón para entrar y cenar juntos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
DEJANOS TU COMENTARIO