domingo, 10 de febrero de 2019

Ser pescadores de hombres...



En el corazón de aquellos que hemos sentido “la Voz” del Señor que nos llamó para consagrar nuestra vida al servicio del Reino resuenan fuertemente las palabras que el Señor dirige hoy a Simón, ese pescador sencillo y esforzado del Evangelio (Lc 5, 1-11) y las que él le dice al Señor:

Jesús: “Navega mar adentro, y echen las redes”
Simón: “Aléjate de mí, Señor, porque soy un pecador”
Jesús: “No temas, de ahora en adelante serás pescador de hombres”.

Como a Simón el Señor nos ha invitado a la aventura de seguirlo, lo hemos dejado todo por Él porque nos ha conquistado su persona, sus palabras, sus gestos, su testimonio de vida coherente y consagrada y hemos querido vivir a su estilo, pero también dimos nuestro “sí”, conscientes de nuestra fragilidad de pecado, de nuestras miserias y de todo aquello que nos recuerda que somos creaturas necesitadas de la “gracia” de Dios para llevar adelante su misión.

Nos anima saber que en éste camino Él viene con nosotras, es nuestra fortaleza, comprende nuestros miedos y los ahuyenta con su sola presencia, es lo que nos permite tener la certeza que vamos por el camino correcto; Jesús no ha comenzado de la nada con nosotras, así como tuvo en cuenta las fragilidades de Pedro y su carisma personal para la pesca, igualmente ha contado con esos dones-carismas que ha puesto en nosotras para invitarnos a seguirlo.

No permitas que tus miedos, fragilidades y seguridades te alejen de “su proyecto de amor” el de consagrarle tu vida.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

DEJANOS TU COMENTARIO

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...