"Gran remedio es el corazón alegre" (Prov 17, 22)

Si nos ponemos a pensar, el sentido del humor no tiene otro origen que el haber sido creados a imagen y semejanza de Dios. Lo que nos lleva a la conclusión de que esta es una de las características divinas del Dios altísimo. Me imagino al Señor riendo a carcajadas al momento de la creación. Una alegría desbordante emergiendo de alguien sin pecado fue lo que produjo la alegría necesaria para hacer andar las estrellas. Estuvo su humor chispeante detrás de cada flor, de cada ave y cada pez. Es que el buen humor puede hacer milagros y Dios puso ese poder en nuestras manos como un gran regalo. Es una bendición que nos ha sido concedida para bendecir a otros. Y como dice el proverbio, para curar como un “gran remedio”. Sin embargo hay algunos que en seguida callan al que hace reír; no lo hagamos. Ayudémoslo a usar ese don para bendición. Yo estoy convencido de que todos debemos desarrollar el sentido del humor. Debemos desarrollarlo y explotarlo hasta que podamos usarlo cuando escasee. Recordemos siempre que la risa es una excelente medicina y hoy podemos usarla con alguien que la necesite con desesperación.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
DEJANOS TU COMENTARIO