viernes, 10 de abril de 2020

Reflexión del Viernes Santo con Sta Teresa de Ávila



El Viernes Santo amanece gris, no sabemos por qué éste día del año suele ser nublado o lluvioso, pero es así. Tal vez el cielo acompañada esta jornada de silencio, oración y meditación sobre la pasión y muerte de nuestro Señor.

Y el gran signo de éste día “la cruz” que no debe parecernos distante en el tiempo sino un signo muy cercano y actual, en muchos casos está encarnado en el cotidiano de las personas, y en otros llega tan de repente que sorprende y deja sin palabras.

Hoy compartimos con vos éste texto del Santo Padre Francisco en la XXVIII JMJ de Río de Janeiro y un poema de la Santa, para que nos acompañen durante el día:

“Jesús con su Cruz recorre nuestras calles y carga nuestros miedos, nuestros problemas, nuestros sufrimientos, también los más profundos. Con la Cruz, Jesús se une al silencio de las víctimas de la violencia, que ya no pueden gritar, sobre todo los inocentes y los indefensos; con la Cruz, Jesús se une a las familias que se encuentran en dificultad, y que lloran la trágica pérdida de sus hijos. 
Con la Cruz Jesús se une a todas las personas que sufren hambre, en un mundo que, por otro lado, se permite el lujo de tirar cada día toneladas de alimentos. Con la cruz, Jesús está junto a tantas madres y padres que sufren al ver a sus hijos víctimas de paraísos artificiales, como la droga. Con la Cruz, Jesús se une a quien es perseguido por su religión, por sus ideas, o simplemente por el color de su piel; Pero la Cruz invita también a dejarnos contagiar por este amor, nos enseña así a mirar siempre al otro con misericordia y amor, sobre todo a quien sufre, a quien tiene necesidad de ayuda, a quien espera una palabra, un gesto. 
La Cruz nos invita a salir de nosotros mismos para ir al encuentro de ellos y tenderles la mano. Muchos rostros, lo hemos visto en el Viacrucis, muchos rostros acompañaron a Jesús en el camino al Calvario: Pilato, el Cireneo, María, las mujeres… Yo te pregunto hoy a vos: Vos, ¿como quien querés ser. Querés ser como Pilato, que no tiene la valentía de ir a contracorriente, para salvar la vida de Jesús, y se lava las manos? Decidme: Vos, sos de los que se lavan las manos, se hacen los distraídos y miran para otro lado, o sos como el Cireneo, que ayuda a Jesús a llevar aquel madero pesado, como María y las otras mujeres, que no tienen miedo de acompañar a Jesús hasta el final, con amor, con ternura. Y vos ¿como cuál de ellos querés ser? ¿Como Pilato, como el Cireneo, como María? Jesús te está mirando ahora y te dice: ¿Me querés ayudar a llevar la Cruz? Hermano y hermana, con toda tu fuerza de joven ¿qué le contestás?” (Discurso del Papa a los Jóvenes, JMJ de Río de Janeiro, 26 de julio de 2013)

Poema de Teresa de Jesús (Algunas estrofas).
Teresa de Jesús, canta los frutos de la redención y  nos invita, estemos como estemos, a poner los ojos en el Crucificado. Ella canta con un lenguaje desconocido para nosotros: "La Cruz todos los males destierra de esta tierra. Es camino para el cielo…"


En la cruz está la vida
y el consuelo,
y ella sola es el camino
para el cielo.

En la cruz está «el Señor
de cielo y tierra»,
y el gozar de mucha paz,
aunque haya guerra.
Todos los males destierra
en este suelo,
y ella sola es el camino
para el cielo.

De la cruz dice la esposa
a su Querido
que es una «palma preciosa»
donde ha subido,
y su fruto le ha sabido
a Dios del cielo,
y ella sola es el camino
para el cielo.

Es una «oliva preciosa»
la santa cruz
que con su aceite nos unta
y nos da luz.
Toma alma mía, toma la cruz
 con gran consuelo,
que ella sola es el camino
para el cielo.

…………………………………….

Después que se puso en cruz
el Salvador,
en la cruz está «la gloria
y el honor»,
y en el padecer dolor
vida y consuelo,
y el camino más seguro
para el cielo.

1 comentario:

DEJANOS TU COMENTARIO

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...